sábado, 13 de octubre de 2012

La triste invisibilidad del patrimonio geológico. Dos ejemplos en Calpe (Parte I).

Una de las razones de ser de este blog es la divulgación de la Geología y nuestro patrimonio geológico. Independientemente de las definiciones formales que existen del concepto de patrimonio geológico, personalmente considero que cualquier afloramiento de roca nos permite conocer una parte de la historia de la Tierra. A veces a gran escala, como en el caso de las cordilleras. Otras veces con pequeños detalles, como el fugaz instante de capturado en los ripples de una corriente efímera o en unas grietas de retracción.

Este planteamiento permite hacer accesible la Geología a todos los públicos, empezando por los niños. Y no requiere de desplazamientos (piénsese, por ejemplo, en las grandes posibilidades de la geología urbana, ya exploradas en este mismo blog). Además no es incompatible con la idea tradicional de lugares altamente representativos en entornos espectaculares. Más bien al contrario: ambas son necesarias y complementarias. El hecho es que en muchas ocasiones este inmenso patrimonio se encuentra oculto ante nuestros propios ojos, invisible. Y ya sabemos que es imposible proteger lo que no se conoce. Curiosamente, esto no ocurre con otras ciencias o disciplinas mejor tratadas: arqueología, flora, fauna,...

Hoy quiero presentaros dos ejemplos de no aprovechamiento del patrimonio geológico. Tienen en común su ubicación, en Calpe (Alicante). También tienen en común su invisibilidad, a pesar de encontrarse en lugares visitados por decenas de miles de personas al año. Por último, la oportunidad perdida se hace más evidente por el contraste ofrecido con otras formas de patrimonio sí protegidas y valoradas.  

Cuando uno piensa en Calpe (en nuestro entorno geográfico próximo, al menos) lo primero que le viene a la mente es el Peñón de Ifach. Tanto si se ha estado en esta localidad costera como si no, las palabras "Calpe" y "Peñón de Ifach" están indisolublemente unidas. Para aquellos que han estado allí, la imagen de esta mole rocosa preside sus recuerdos como icono indiscutible de la población. Pero no, no vamos a hablar del Peñón de Ifach. Al menos directamente.

Este verano he pasado un fin de semana alojado en el aparthotel Europa, en Calpe. Se encuentra junto a un yacimiento arqueológico conocido como los Baños de la Reina. Básicamente el emplazamiento está integrado por dos enclaves: una villa romana (quizá no sea la denominación correcta en términos históricos, pero no soy especialista en la materia) y unas piscinas excavadas en unos bajíos costeros interpretados como jardines acuáticos o, incluso, una piscifactoría. El yacimiento está excavado en gran parte pero, con excepción de las piscinas, no es visitable. El público que visita la zona, posiblemente durante los paseos vespertinos propios de las vacaciones o al acercarse a la playa, encuentra paneles que ayudan a la interpretación de los restos, tanto en el caso de la villa como en el de las piscinas. Además, en las inmediaciones se encuentra una torre que otro panel nos permite identificar como los restos de un antiguo molino de viento (Molino del Morelló, al parecer edificado aprovechando una antigua torre vigía, que es lo que parece).

Los Baños de la Reina desde mi habitación del hotel. En segundo plano la torre del molino. Al fondo, apenas visible, la Sierra  Helada
Panel explicativo del yacimiento arqueológico (click para aumentar)
Por la mañana decidí bajar a darme un baño matinal, apenas salido el sol, en una pequeña cala que había divisado junto a los baños. Al explorar el lugar, inmediatamente me llamó la atención el aspecto de las rocas...

Esta es la pequeña cala junto a los Baños de la Reina. Las piscinas están excavadas en las rocas del centro de la imagen. A la derecha el paseo marítimo, que las separa del resto del yacimiento
Quizá ya tú también sientes curiosidad al ver estas rocas. Si es así, sigue leyendo
Puesto que nuestros ancestros romanos cortaron la roca para excavar las piscinas la estratificación cruzada es perfectamente visible. Eso es una suerte, ya que en otros puntos en los que la roca no fue trabajada la erosión marina enmascara las estructuras sedimentarias. Tras el baño, vino la obligada inspección en detalle del afloramiento. La comparación con otros afloramientos parecidos permite identificarlo rápidamente como areniscas eólicas que en un cierto momento constituyeron un campo de dunas. En la siguientes imágenes repasamos diversos detalles como la estratificación cruzada de surco, la presencia de galerías de excavación horizontales entre las láminas de los foresets, etc. Litológicamente se trata aparentemente de calcarenitas de grano fino como sugiere el abundante burbujeo al ácido clorhídrico, muy bien seleccionadas. A techo y en ciertos niveles intermedios aparecen niveles de costras calcáreas, quizá evidencias de antiguos paleosuelos (caliches o calcretas) o  niveles freáticos en distintos momentos.

Vista hacia el paseo marítimo (fijaos en el pretil). Al fondo el aparthotel Europa. Se observan diversos sets con superficies límite asociadas, probablemente, a la migración de dunas
Nueva vista en la que se aprecia perfectamente la estructura cruzada de surco
Sets de estratificación cruzada planar
Niveles de costras calcáreas horizontales (centro de la imagen). Cortan a los sets de estratificación cruzada y probablemente tengan su origen en la posición del nivel freático en un cierto instante dentro del campo de dunas
Detalle de bioturbación en forma de galerías horizontales
Caliche en el techo del afloramiento, evidentemente el nivel de suelo sobre el que se construyó el  paseo marítimo
Vista general del afloramiento mirando en dirección al núcleo originario de Calpe. En primer término una de las piscinas
Como veis, hay mucho que ver y aprender en este afloramiento, pero todavía podemos ir más lejos si analizamos el contexto geomorfológico. Al recorrer todo el paseo marítimo desde el puerto de Calpe (construido al abrigo del peñón) hasta el acantilado en la playa del Arenal, junto al núcleo urbano original de la población, nos es posible descubrir varios afloramientos aislados de nuestras areniscas eólicas en forma de escollos a poca distancia de la orilla. El paseo marítimo recubre un elemento del relieve original, la línea topográficamente más elevada entre el mar por un lado y las salinas por el otro. De hecho, el terreno desciende suavemente desde el paseo hasta la avenida de los Ejércitos Españoles, eje viario que constituye el límite entre las edificaciones en la línea de costa y las salinas.

Afloramiento aislado de nuestras areniscas en la playa del Bol
Veamos ahora una imagen satélite, lo que nos permitirá analizar el entorno desde una perspectiva general.


Vista satélite de Calpe. Click para ampliar
Esta vista nos permite deducir muchas cosas. En primer lugar vemos que el peñón se encuentra conectado a tierra firme por una franja estrecha, conocida como tómbolo. Durante buena parte de su historia reciente el peñón ha sido una isla frente a la costa. La dinámica litoral ha transportado arena que se ha depositado al abrigo de esta mole rocosa, formando dos barras que, finalmente, se unieron aislando una laguna salada/salobre tras ellas, las actuales salinas. Este proceso se ha producido de forma análoga en muchos puntos del litoral mediterráneo de la península  especialmente en el este y sureste. De ahí la abundancia de marjales, albuferas, salinas y almadrabas que pueden encontrarse a lo largo de la costa. Posteriormente los sedimentos transportados por las ramblas desde las montañas próximas junto con la acción antrópica (por ejemplo las labores de producción de sal) han colmatado la laguna, dejándola reducida a lo que vemos hoy. Sobre esas barras se desarrollaron los cordones dunares. El contexto transgresivo actual en la costa mediterránea es el responsable de que este sistema de dunas fósiles esté ahora expuesto a la erosión marina, con algunas de sus zonas exteriores sumergidas.

Salinas de Calpe, vista hacia el Este. Obsérvese la alineación de edificios sobre el cordón dunar, en la estrecha franja entre el mar y las salinas. Sin embargo, en la playa de la Fossa no he encontrado rastros de las dunas fósiles 
Es interesante observar como la historia geológica no sólo condiciona el paisaje, sino que también controla la vida de los seres humanos enormemente, generalmente sin que éste llegue a ser consciente de ello salvo en casos de catástrofes naturales, que paradójicamente se juzgan como eventos anómalos cuando, en realidad, son la norma si se emplea la escala adecuada.

El viento que construyó el sistema dunar también motivó, cientos de años después, la existencia de un molino. Los romanos eligieron para su asentamiento un lugar que reunía las siguientes características: proximidad al mar, zona elevada y seca y, por último, un terreno lo suficientemente firme (las calcarenitas) para poder edificar con seguridad (compárese con las arcillas y limos de la laguna). Actualmente excavamos más profundamente para construir, ya que los edificios de apartamentos modernos tienen garajes en el subsuelo. El nivel de cimentación se encuentra sobre los depósitos de barra infrayacentes a las dunas. Algunos de los bloques de areniscas están desperdigados a modo de 'esculturas naturales' en las zonas ajardinadas de las avenidas y el propio paseo marítimo. Algunos ejemplos:

Bloque de arenisca que muestra ripples simétricos en su cara superior
Otro ejemplo de bloque, en este caso con estratificación hummocky 
A lo largo del paseo marítimo de Calpe es posible encontrar paneles informativos sobre el molino, el yacimiento arqueológico y zonas de microrreserva de flora establecidas por la Generalitat Valenciana. Pero ni una sola palabra acerca de la geología de la zona, a pesar de estar tan a la vista. Ni una palabra sobre la historia de la isla que dejó de serlo, las antiguas dunas, el origen de las salinas...ni una palabra acerca de cómo todo ello ha condicionado la vida humana en este lugar. ¿Por qué? ¿Acaso es un relato carente de interés? Pienso en las oportunidades perdidas cada vez que un niño pasa por la zona y admira los restos romanos, pero se marcha sin tener una opción de leer la historia reciente de la Tierra escrita en las mismas rocas que ellos excavaron tan afanosamente. Tristemente, un visitante actual no tiene más opciones de comprender lo que ve que uno de aquellos constructores.

¿Cómo acabar un artículo sobre Calpe sin una imagen del Peñón? En primer término, otra piscina
Nota: Es posible (aunque no probable, ya que he recorrido el lugar en varias ocasiones) que exista información relativa a la geología de la zona desplegada por allí que se me haya pasado por alto. En ese caso, estaré encantado de modificar mi relato para darlo a conocer).

Visita otro ejemplo de patrimonio geológico desconocido en Calpe, en la playa del Arenal.

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1 comentario :

  1. Buen material, como siempre.
    Es verdad como no sea un plegamiento espectacular o algo así, lo demas parece que no tiene interes para la gente. Poco se puede hablar de geologia con la gente en general, puede pasar que te contesten con lo de, hombre claro eso de la geologia y la tierra hueca eso si es misterioso, y poco se puede hacer en estos casos.

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